Orígenes de La Fundación Centro Humanístico Micael
Las raíces de la Pedagogía Waldorf en Medellín iniciaron con la apertura del Centro Humanístico Micael el 15 de enero de 1986, cuando un acta de fundación da validez al inicio de este centro pensado para la formación de adultos en torno a la antroposofía y la pedagogía Waldorf; la gran benefactora, Benedikta Zur Nieden, quien había llegado de Alemania en 1934 con su esposo el filántropo Diego Echavarria Misas, estaba destinada a dejar el legado de la Pedagogía Waldorf en Antioquia.
Benedikta, caracterizada por su alma generosa, era una mujer muy consciente, sensible y servicial. Decidió dar toda su fortuna a causas sociales para Medellín, esto luego de la muerte de Isolda, su hija, y Diego Echavarria, su esposo; la trágica experiencia de sus muertes impulsaron a Benedikta a preocuparse aún más por el bienestar de las personas. Residió en Medellín aproximadamente 54 años, esta parte de Colombia fue su segundo hogar, por esta razón ya para el año 1988, la institución madre formadora de docentes, Fundación Centro Humanístico Micael, y el Colegio Waldorf Isolda Echavarria estaban dando sus primeros pasos.
Los orígenes de la Antroposofía y la Pedagogía Waldorf se remontan a principios del siglo XX. Rudolf Steiner, filósofo y visionario, fue el creador de este impulso, pero no fue hasta 1981, que la ciudad conoció por medio de Benedikta Zur Nieden dicha iniciativa. Fue evidente para las personas que la rodeaban en este ámbito, para entonces, su preocupación de que la pedagogía pudiera gestarse y fortalecerse para un mejor futuro social.,
Desde entonces El Centro Humanístico Micael se ha dedicado al fomento de la Pedagogía Waldorf; educación basada en el respeto por el otro y en el arte como medio para la formación personal y el aprendizaje en general, tanto en la escuela como en el camino de la vida.